La Fauna Auxiliar es aquélla que es beneficiosa para los cultivos ya que actúa como polinizadora de sus flores (es el caso de las abejas, por ejemplo), o como controladora de sus plagas mediante depredación o parasitoidismo. Atraer y conservar las poblaciones de Fauna Auxiliar es por tanto muy importante para conseguir que nuestros cultivos se desarrollen sanos y den buenas cosechas. Además de aves insectívoras, erizos, murciélagos, reptiles y anfibios, numerosos grupos de insectos (sírfidos, crisópidos, míridos, icneumónidos, bracónidos, coccinélidos, lampíridos, mántidos…), arácnidos y ácaros (fitoseidos, tercipelo, torbellino…) forman parte de la Fauna Auxiliar.